Protesta saharaui en Sevilla

Unos cuarenta saharauis residentes en Sevilla se han concentrado esta mañana frente al Consulado de Marruecos en esta ciudad, situado en el Camino de los Descubrimientos de la Isla de la Cartuja.

Los manifestantes, que han gritado consignas contra el reino marroquí y a favor del Frente Polisario, se han reunido para clamar contra la toma y el desmantelamiento del campamento de El Aaiún que efectuó ayer la policía de Marruecos. Es la segunda protesta que acontece en Sevilla después de la que ayer se llevó a cabo en las puertas del Ayuntamiento.

Según Mulay Lahsem, para el próximo sábado está programada una nueva protesta frente a la Embajada de Marruecos en Madrid.

Los encierros de Sevilla

Ernest Hemingway, escritor y periodista estadounidense conocido, entre otras cosas, por su afición a las fiestas de San Fermín, hubiera parafraseado y adaptado a nuestra ciudad la famosa cita de Obélix el Galo -«estos romanos están locos»- si hubiera podido levantar la cabeza para presenciar el encierro de esta mañana en la Plaza Nueva.

No faltó una persona, ni un detalle. Allí estaban a las diez y media, como un clavo, los policías-mozos con los pañuelos colorados del Sindicato Profesional de Policía Municipal de España (Sppme) y los periódicos enrollados. No tardó en llegar la Charanga del Pirata, y con un «música, maestro» comenzó el baile y la fiesta.

Pero faltaba alguien por llegar. Aquél a quien habían venido a hacer la ofrenda. San Alfredín, el santo «patrón de los incumplimientos», como rezaba un improvisado escapulario en su hábito, llegó acompañado por la hermana Sor Nevada “La Tacaña”. Justo detrás, cerrando el cortejo, los tres maestros que iban a lidiar a dos peligrosos astados: Recortao (el del recorte a los funcionarios) y Malpagao (el del pago de la productividad). Eran algo más de las 11, y los policías-mozos hicieron sonar el petardazo -primo sevillano del chupinazo- con el que daba comienzo el encierro.

“San Alfredín, venimos a pedirte, por favor, nos pagues lo que nos debes…”, cantaban los mozos enfervecidos delante del patrón. El portavoz de los policías, Manuel Bustelo, se refirió a “los continuos incumplimientos” del Ayuntamiento respecto a “los acuerdos que tenemos firmados desde el año pasado” y antes, en los que “no sólo se recogen “cuestiones económicas”, sino también otras relacionadas con “medios, instalaciones o vestuario”. Tener «el culo plano después de tantas reuniones», como dice Bustelo, explica que sus muchachos acuedieran al encuentro del santo cantando aquello de ”a Plaza Nueva hemos de ir, pa que nos pague, pa que nos pague… a Plaza Nueva hemos de ir, pa que nos pague San Alfredín”.

Mientras, los toros Recortao y Malpagao hacían de las suyas entre el gentío. Aunque los tres maestros, con el Niño de la Pipa -de extraño pero, obviamente, casual parecido con el teniente de alcalde, Antonio Rodrigo Torrijos– como cabeza de cartel, intentaban torearlos, finalmente quedaron desbocados y los mozos acabaron corriendo un encierro sin incidentes y con mucha guasa por toda la Plaza Nueva y por una calle Sierpes convertida por un momento en la Estafeta de Sevilla. Seguro que Hemingway hubiera disfrutado de lo lindo viendo a estos sanfermines desde la terraza del Bar Laredo.

Los trabajadores de Tussam protestan ante el pleno del Ayuntamiento

Los trabajadores de Tussam han reclamado en el pleno municipal celebrado hoy una solución para la empresa tras el cambio de postura del presidente y concejal de Movilidad, Fran Fernández, que en la reunión de ayer retiró de encima de la mesa de negociación el plan de viabilidad.

Este viraje se produce para sorpresa de propios y extraños, ya que el acuerdo se encontraba bastante próximo, como afirmaban hasta los medios afines al Gobierno municipal, e incluso el propio Fernández daba su apoyo al plan de viabilidad en la mañana de ayer, antes de acudir a la reunión con el secretario general de los socialistas sevillanos, José Antonio Viera.

Tras manifestar su protesta, los trabajadores fueron desalojados por miembros de la policía local, siguiendo las indicaciones de la presidenta del pleno, Rosamar Prieto Castro. Con posterioridad, continuaron con sus manifestaciones en la puerta del Ayuntamiento hasta que se disolvió la concentración.

[Youtube=http://www.youtube.com/watch?v=6YASndwaNnA]

Guillermo Guitérrez vuelve a las andadas

Por Jack Daniel’s

Cuando a Guillermo Gutiérrez, vicepresidente de Tussam, le colocan un micrófono por delante, miente más que duerme. Sobre todo durante las reuniones en las que ha de ejercer como negociador junto a ese otro gusiluz dormilón llamado Carlos Arizaga. Debe ser que el esfuerzo del diálogo tiene un potente efecto sedante.

Gutiérrez ha vuelto a hacer gala de sus viejas artes utilizando de nuevo los argumentos provocadores de siempre y con los medios serviles cual dóciles doncellas enamoradas bajo los ladridos del amo, con ese afán por impregnar a la opinión pública del mensaje interesado que cubra y vele sus carencias y sus verdaderas intenciones. Si de paso se echa al público encima de los trabajadores, mejor que mejor.

Sería conveniente, por el bien de la ciudadanía y por el de su propio estado anímico, que este aguador profesional –cada vez que Fran Fernández tiene sed durante una reunión le ordena levantarse e ir por una jarra de agua– confesara en público la humillación que sintió cuando su jefe jerárquico retiró de encima de la mesa su propuesta estrella, el famoso “plan de viabilidad”. Si esto no es que desacrediten tu trabajo en público, los cerdos no es que vuelen, sino que son expertos astronautas.

Si Gutiérrez tuviera vergüenza y dignidad políticas, lo que sin duda es pedir demasiado, hubiera presentado su dimisión en ese mismo momento. Pero, tal y como me cuenta un veterano militante socialista, Gutiérrez lleva dimitiendo toda su carrera como político en cuantos cargos ha desempeñado, sin que tal dimisión se haya hecho efectiva jamás.

Así es como funcionan los estómagos agradecidos al sacrosanto acróstico que les da de comer, aparentando una cosa para luego, entre bambalinas, hacer otra completamente distinta, cuando no contraria.

No resulta nada difícil cerrar la boca de los medios con el dinero que nunca procede de tus propios bolsillos, para eso no hay quiebra. Forma parte de esa habilidad ancestral, tan en boga en los tiempos que vivimos, de mostrar cierta laxitud y flojera de miras a la hora de administrar el erario público. Pero tales prácticas jamás han otorgado la razón a nadie, y mucho menos cuando las maniobras que todo el mundo ha podido ver en estos días dejan al descubierto y hasta las cejas de descrédito.

Gutiérrez sabe mejor que nadie que, si se produce la huelga, se verán cumplidos sus objetivos y, si no también, porque será señal de que quienes todos tenemos en mente habrán conseguido lo que andaban buscando y saciado su ambición sin límites. Así es la política y así nos va a los ciudadanos.

[También en El Blog de Jack Daniel’s]